Los productos naturales, ¡vaya timo!
La prensa y las evidencias científicas.
El Pais: Un estudio afirma que los alimentos orgánicos son tan sanos como los otros.
La noticia es bastante aséptica y rigurosa, al principio, describiendo las principales conclusiones del meta análisis. Luego habla con un experto de la sociedad española de endocrinología y nutrición que hace una valoración de los resultados, pero al final se lía al caer en el manido principio de equidistancia, dándole voz al corresponsable de agroecología de «Ecologistas en Acción«. A ver, Ecologistas en Acción es una organización que apoya actos violentos como destrozar campos experimentales de transgénicos, y poner al mismo nivel un estudio científico, un médico que preside una sociedad y a un agroborroka viene a ser como llamar a un astrólogo de los que salen por la TDT de madrugada para comentar el aterrizaje de la sonda curiosity en Marte, y si te parece exagerada la comparación, solo hay que fijarse en lo que dice: «Seguro que si busco, encuentro cientos de artículos en revistas de igual peso que dicen lo contrario», Pues mira, podías haberlos buscado y haberlos citado, pero no, parece que no lo has hecho.
Sigue hablando
López es tajante: «Los autores dicen en sus conclusiones que los ecológicos son mejores. Que pueden reducir la exposición a pesticidas y a bacterias resistentes. Otra cosa es lo que los autores entiendan por ventajas nutricionales ‘significativas» queda claro que de química, López flojito y el estudio no parece habérselo leído. Muchas veces llegan a la prensa titulares alarmante de «se encuentran restos de (ponga aquí la sustancia química, droga o fármaco que más le asuste) en el agua potable» Que parecen dar a entender que nos estamos envenenado. Luego lees el texto o buscas la fuente y la concentración es ridícula, pero claro, como los métodos de análisis son cada vez mejores, ahora podemos detectar trazas que antes no detectábamos, es decir, no es que la calidad del agua sea peor, sino que los análisis son cada vez mejores. Si los niveles detectados superaran el umbral de toxicidad, obviamente se cortaría el suministro de agua, pero siempre están muchos órdenes de magnitud por debajo, es decir, a niveles que no tienen efecto fisiológico. Si se hubiera leído el estudio original (algo que parece no haber hecho) hubiera visto que los autores dicen: The risk for contamination with detectable pesticide residues was lower among organic than conventional produce (risk difference, 30% [CI, −37% to −23%]), but differences in risk for exceeding maximum allowed limits were smalltraduzco: es más frecuente que aparezcan trazas de pesticidas en los convencionales que en el orgánico, pero la diferencia de posibilidades de una contaminación (exceder el máximo autorizado) es muy pequeña entre ambos tipos de cultivo.
El ecologista les ve otras ventajas. «Hay estudios que comparan pares de alimentos frescos [orgánicos y convencionales] que dicen que los ecológico tienen mayores concentraciones de oligoelementos, minerales y vitaminas. Además, se conservan mejor, duran más tiempo en buen estado y se pudren de distinta manera» Aquí vuelve a coger el rábano por las hojas, se refiere a un único estudio específico sobre berenjenas (ignora los 200 restantes) que encima no llega a esas conclusiones. Ve una mayor acumulación de oligoelementos en los ecológicos, pero que depende más del año que del tipo de cultivo. Pasa por alto que un año, el cultivo convencional tiene más oligoelementos que en ecológico que otro año, y lo más gracioso, es un estudio de contenido, pero no hay datos de que su consumo correlacione con efectos sobre la salud.
No garantiza nada para la salud |
Por supuesto, como todo buen ecologista acientífico, recurre a la teoría de la conspiración:
Panel de expertos de Ecologistas en Acción. |