Soy yo quien decide
Explica el columnista Sidney Harris que, en una ocasión, acompañó a un amigo suyo a comprar el periódico. Al llegar al quiosco, su amigo saludó amablemente al vendedor. El quiosquero, en cambio, respondió con modales bruscos y desconsiderados y le lanzó el periódico de mala manera. Su amigo, no obstante, sonrió, y pausadamente deseó al quiosquero que pasase un buen fin de semana. Al continuar su camino, Sidney le dijo:
– Oye…¿ese hombre siempre te trata así?
– Si, por desgracia.
– Y tú, ¿siempre te muestras con él tan educado y amable?
– Si, así es.
– Y ¿me quieres decir por qué tú eres tan amable con él, cuando el es tan antipático contigo?
– Es bien fácil. Porque yo no quiero que sea él quien decida cómo me he de comportar yo.