Sustancias Peligrosas: Ricina
Bueno me dispongo a crear una nueva serie que la ire subiendo cada semana (lo intentaré) sobre sustancias quimicas peligrosas e interesantes. En este caso, con el altercado ocurrido en Washington de las cartas envidadas a Obama y al congresista Roger Wicker voy ha hablar sobre una toxina llamada Ricina.
La ricina es una de las toxinas más potentes conocidas, la cual se extrae de las semillas del ricino (Ricinus communis). Pertenece a la familia de proteínas conocidas como proteínas inactivadoras de ribosomas (RIP) que se unen a los ribosomas de las células eucariotas paralizando la síntesis de proteínas, lo que causa su muerte por apoptosis. Fue aislada en 1888 por Stillmark cuando observó que el extracto de las semillas aglutinaba las células sanguíneas. Hoy en día, se sabe que la aglutinación por el extracto de las semillas de ricino se debe a otra toxina llamada RCA (Aglutinina del Ricinus communis).
La ricina causa hemorragia intestinal, seguida de diarrea a veces sanguinolenta, vómitos, deshidratación e hipotensión. Esta toxina puede causar la muerte tras una agonía que puede durar hasta diez días, aunque lo normal es que si el paciente no ha muerto en tres o cinco días se recupere. La dosis letal en un adulto que ingiera la ricina es de un miligramo. Si es inhalada o inyectada, la dosis letal es de apenas 500 microgramos
La ricina es fácilmente purificada del ricino. La pulpa de la semilla que queda de prensar el ricino contiene en promedio alrededor de 5% del peso de la ricina. El método de extracción es muy similar a la preparación de proteína de soja aislada.
La ricina puede tener uso terapéutico:
- Como inmunotoxina en el tratamiento de cáncer, como la llamada «bala mágica» para atacar específicamente las células cancerígenas y destruirlas: La ricina puede estar conectada con el anticuerpo monoclonal para atacar células malignas reconocidas por el anticuerpo. Se cree posible que la modificación de ricina reduzca su toxicidad en humanos, pero no las células cancerígenas. Una aproximación prometedora se encuentra también al usar la subunidad no tóxica B como un vehículo para transportar antígenos en las células, por medio de lo cual se incrementaría en gran medida su inmunogenicidad. También funcionan muy bien en aplicaciones «in vitro», por ejemplo en los trasplantes de médula ósea.
- Como un adyuvante, con potenciales implicaciones para desarrollar vacunas mucosas.
- Para la ablación toxigénica. Esta puede ser usada para estudiar o generar modelos de animales transgénicos con enfermedades degenerativas.
- Para el transporte suicida. Inyectando ricina en el nervio vago se pueden destruir selectivamente las neuronas. El transporte suicida se ha utilizado en:
- La realización de un mapa anatómico de las neuronas.
- La creación de modelos de enfermedades neuronales degenerativas.
- La realización de estudios sobre lesiones y sus curas en nervios periféricos.