¿Es necesario estar presente en las redes sociales?
Me sorprende que haya docentes que no hagan uso de las redes sociales y que presumen, ufanamente, de no hacerlo. Por supuesto que tienen derecho a esa elección, pero son tantas las ventajas que, para mí, tiene estar presente en las mismas que me parece un desatino no aprovechar esta oportunidad.
Entre otras, destacaría:
- Obtener información relevante de otros docentes.
- Ofrecer información relevante a otros docentes.
- Promover actividades y proyectos que, de otra forma, serían inviables.
- Propiciar el diálogo y la reflexión con otros compañeros que derivan, en muchas ocasiones, en la construcción de conexiones.
- Favorecer la competencia digital pues los puntos anteriores nos “obligan” a aprender a usar nuevas herramientas tecnológicas.
Es cierto, también, que le veo un peligro al uso de estos canales de comunicación más serio que caer en una excesiva dependencia: la tendencia a formar colmenas.
Así, puede suceder que nos comportemos como abejas que solo van a una única colmena, la A, por ejemplo, y que nuestros mensajes e interacciones solo llegan a las otras abejas de ese mismo panal que, además, ya están saturadas de recibir constantemente el mismo tipo de interrelación. Estas abejas, por otro lado, no interactúan ni les llegan los mensajes de las de la colmena B. Ni a las de la B le llegan los de la A…
Por último, creo que son de sobra conocidos los usos educativos de Facebook, de Twitter y de Instagram, pero no tanto los de Telegram que, aunque no es propiamente una red sino una aplicación de mensajería se está postulando como una grandísima alternativa a estos canales más conocidos con la interactividad y facilidad de uso que presentan los grupos y los canales de difusión dentro de la misma.
Actualización:añado algunas de las respuestas que amablemente me mandaron desde Twitter sobre esta entrada (puedes acceder a los tuits pinchando en las imágenes)