Parte del arsenal nuclear de EE.UU. se controla con equipos antiguos que usan disquetes
Tras el escándalo que ha salpicado a algunos oficiales de la USAF (United States Air Force), la cadena norteamericana CBS ha iniciado un trabajo de investigación para el prestigioso programa «60 Minutos», y lo que ha encontrado tras visitar una base en Wyoming es desconcertante: el control de misiles nucleares se realiza con equipos antiguos que usan disquetes.
Por si fuera poco, las comunicaciones de la base con el exterior tienen lugar mediante conexiones analógicas en un estado tan lamentable, que los oficiales tienen dificultad para escuchar las órdenes que se les cursan.
Como podéis apreciar en el vídeo, a los equipos que aparecen en el reportaje sólo les falta un sistema de arranque con manivela. La seguridad de una instalación así se basa en que no está conectada a Internet (además de los rigurosos controles de acceso físico), seguramente el software estará hecho a medida, y es tan antiguo que los hacker puede que no hubieran nacido cuando se desarrolló… Probablemente los equipos son muy seguros por estar probados hasta la saciedad (cuando no pierden aceite), pero estamos hablando del arma de destrucción más poderosa: la bomba atómica.
En cuanto a los disquetes, si bien se siguen empleando como medio de arranque seguro dado su carácter universal, en el caso que nos ocupa es un tanto surrealista. Por las imágenes parece que son más grandes que el estándar de 5,25 pulgadas y quiero pensar que los fabrican a medida para la USAF y son «modernos». De lo contrario, con el índice de fallos que presentan por sectores defectuosos que aparecen con el uso, confiar los protocolos de lanzamiento a algo así pone los pelos de punta (y en DEFCON-1).
¿Os imagináis una alarma? Pepeeee, que no se bien que ha dicho Obama: si que armemos un misil o que disparemos sobre Chernóbíl. Espera, nene, que está arrancando el disco y parece que está atascado…
Bien es cierto que el ingenio humano es capaz de evitar cualquier desastre debido a un automatismo. Recuerdo en este momento cómo Neil Armstrong «salvó» la misión Apollo 11 cuando el ordenador de vuelo falló y tuvo que alunizar «a mano» para no estrellarse, amén de poner en marcha con la punta de un bolígrafo el motor del LEM para abandonar la Luna, porque el interruptor se rompió en algún momento durante el vuelo. Pero, insisto, hablamos de misiles intercontinentales armados con ojivas nucleares.
Con el lío que hay ahora en Ucrania, esos locos llamados políticos a los que votamos, einstalaciones de tecnología punta de los 60 gobernando los mega-petardos… Intentad disfrutar del fin de semana, que cualquier día salimos volando por los aires.
Vía | Genbeta